"MAS CHISTES DE AULA ", JA, JA, JA
Llega María a su casa después de hacer un examen en el cole, y el padre le pregunta:
- ¿cómo te fue en el examen?
- Papa, no sé, pero el maestro Oliver es muy religioso
- ¿Por qué, María?
- Porque cuando estaba corrigiendo mi examen solamente decía: ¡Ay Dios mío!, ¡Santísimo!, ¡Madre de Dios!...
En clase de mates la profesora Eulogia le pregunta a Thalía
- Si en un bolsillo tienes 10.000’00 € y en el otro 50.000’00 €, ¿qué tienes en total?
- A lo que Thalía contesta:
- Pues, los pantalones de otra.
SOLEn clase de cono, Eduardo le dice a Julián:
- ¡Has visto!, el Sol con lo grande que es y no le dejan salir de noche.
Mamá, mamá en el colegio me dicen olvidadizo:
- No te preocupes Hacomar, pero yo no soy tu mamá, soy tu vecina.
En clase de cono, el profesor Oliver le pregunta a Salma:
- ¿Qué es una orilla?
Y Salma le contesta:
- Sesenta minutillos, profe.
Elea le dice a Don Esteban
- Perdone, ¿qué hora es?
- A ver, las doce y cuarto
- Jo, otra vez
- ¿Qué te pasa?
- Nada, que me he pasado la mañana preguntando la hora a los profesores y ninguno se pone de acuerdo
La profesora Lily le pregunta a Daniel
- ¿Cómo mató David a Goliat?
- Con una moto
- ¿cómo, con una moto?, será con una honda
- ¡Ah!, ¿pero, tenía que decir la marca?
En un mercadillo que se hizo en el cole para sacar dinero. Alejandro estaba vendiendo animales, y fue a comprar Carlos Airam:
- ¿Cuánto vale el perrito?
- 300’00 €
- ¿Cuánto vale la tortuga?
- 100’00 €
- Y ¿cuánto vale la cacatúa?
- Oye Airam, la caca-mía no la vendo.
Después de la clase de gimnasia, en la ducha, Moisés le dice a Don Pepe:
- Se me acabó el champoo
A lo que el maestro contesta:
- Pues, usa el mío
- No
- ¿Por qué?
- Porque dice para cabello seco y yo ya me lo mojé.
GUAGUAEn la parada de guaguas del cole, Elizet le pregunta a Chyntia:
- Si aquella guagua fuera de chocolate, ¿por dónde empezarías a comértela?
- Por las ruedas, así no se me escaparía.
La profesora Eulogia en 6º B:
- En esta clase, el 50% de los alumnos no sabe calcular correctamente.
A lo que Ylenia contesta:
- Pero, si sólo somos 28, profe!.
CACEROLAEn clase de lengua el profesor Oliver le habla a una alumna:
- Claudia, dime una palabra que empiece por la letra “M”
- Cacerola
- ¿Dónde tiene cacerola la “M”, Claudia?
- En el mango, profe.
DIOSHacomar y Adal eran extremadamente traviesos de pequeños. Siempre estaban metiéndose en problemas y sus padres sabían que si alguna travesura ocurría en su colegio sus hijos estaban seguramente involucrados.
La mamá de los niños escuchó que el profesor Oliver había tenido mucho éxito disciplinando niños, así que le pidió que hablara con sus hijos. El profesor aceptó pero pidió verlos de forma separada, así que la mamá envió primero al niño más flaco.
El profesro, sentó al niño frente a él y le preguntó gravemente:
¿Dónde está Dios?
El niño se quedó boquiabierto pero no respondió, sólo se quedó sentado con los ojos en otro lado.
Así que el profesor repitió la pregunta en un tono todavía más grave:
¿Dónde está Dios?
De nuevo el niño no contestó.
Entonces el profesor subió de tono su voz, aún más, agitó su dedo frente a la cara del niño, y gritó:
¿Dónde está Dios?
El niño salió gritando, corrió hasta su casa y se escondió en el armario, cerrando la puerta.
Cuando su hermano lo encontró en el armario le preguntó:
¿Qué pasó?
El hermano sin aliento le contestó:
¡Ahora si que estamos en graves problemas hermano, han secuestrado a Dios y creen que nosotros lo tenemos!
La mamá de los niños escuchó que el profesor Oliver había tenido mucho éxito disciplinando niños, así que le pidió que hablara con sus hijos. El profesor aceptó pero pidió verlos de forma separada, así que la mamá envió primero al niño más flaco.
El profesro, sentó al niño frente a él y le preguntó gravemente:
¿Dónde está Dios?
El niño se quedó boquiabierto pero no respondió, sólo se quedó sentado con los ojos en otro lado.
Así que el profesor repitió la pregunta en un tono todavía más grave:
¿Dónde está Dios?
De nuevo el niño no contestó.
Entonces el profesor subió de tono su voz, aún más, agitó su dedo frente a la cara del niño, y gritó:
¿Dónde está Dios?
El niño salió gritando, corrió hasta su casa y se escondió en el armario, cerrando la puerta.
Cuando su hermano lo encontró en el armario le preguntó:
¿Qué pasó?
El hermano sin aliento le contestó:
¡Ahora si que estamos en graves problemas hermano, han secuestrado a Dios y creen que nosotros lo tenemos!
TROMPOEstaban Eduardo y Pedro en el recreo, cada uno con un trompo y uno le dice al otro:
A ver, baila el trompo.
Y el otro le contesta:
No sabo.
El otro le dice:
No se dice "no sabo" se dice "no sepo".
En ese momento la profesora Tati estaba escuchando la conversación de los niños y les dice:
No se dice ni no sabo ni no sepo.
Los niños le preguntan:
Entonces, ¿Cómo se dice?
La profesora les contesta:
No sé.
Y los niños le dicen:
Entonces, por qué se mete.
A ver, baila el trompo.
Y el otro le contesta:
No sabo.
El otro le dice:
No se dice "no sabo" se dice "no sepo".
En ese momento la profesora Tati estaba escuchando la conversación de los niños y les dice:
No se dice ni no sabo ni no sepo.
Los niños le preguntan:
Entonces, ¿Cómo se dice?
La profesora les contesta:
No sé.
Y los niños le dicen:
Entonces, por qué se mete.
NOTASValentina llega a su casa y le dice a su mamá:
Mami, aquí está mis notas.
La mamá las toma, las observa y dice:
¿Quuueeee? ¡Estas calificaciones merecen una paliza!
Y la niña le contesta:
¿Verdad que sí mamá? ¡Vamos, yo sé dónde vive la maestra!
Mami, aquí está mis notas.
La mamá las toma, las observa y dice:
¿Quuueeee? ¡Estas calificaciones merecen una paliza!
Y la niña le contesta:
¿Verdad que sí mamá? ¡Vamos, yo sé dónde vive la maestra!
MARIDOSLa maestra Lili dice:
A ver niños, si yo digo "Estoy buscando marido", ¿En qué tiempo estoy hablando?
Se levanta Erika y le dice:
Tiempo perdido, maestra.
A ver niños, si yo digo "Estoy buscando marido", ¿En qué tiempo estoy hablando?
Se levanta Erika y le dice:
Tiempo perdido, maestra.
RECREOEn el recreo se reúnen cinco niños y dice Eduardo:
Le voy a decir a mi papi que me compre el Océano Pacífico.
Y luego dice Pedro:
Le voy a decir a mi papi que me compre el Océano Atlántico.
Y luego dice Julián:
Le voy a decir a mi papi que me compre el submarino que sale en Atlantis.
Y dice Alejandro:
Le voy a decir a mi papi que me compre el Charco el Viento.
Y Daniel dice:
¡Pues yo le voy a decir a mi papi que no les venda nada!
Le voy a decir a mi papi que me compre el Océano Pacífico.
Y luego dice Pedro:
Le voy a decir a mi papi que me compre el Océano Atlántico.
Y luego dice Julián:
Le voy a decir a mi papi que me compre el submarino que sale en Atlantis.
Y dice Alejandro:
Le voy a decir a mi papi que me compre el Charco el Viento.
Y Daniel dice:
¡Pues yo le voy a decir a mi papi que no les venda nada!
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